Situado en una ubicación central en el puerto de Callao, Perú, hay grandes sitios de deposición donde el polvo mineral de las minas se almacena de forma intermedia antes de su posterior transporte para su carga a bordo de los barcos. El polvo mineral contiene, entre otras sustancias, plomo y otras partículas peligrosas en el aire. Los sitios de deposición están situados cerca de áreas de vivienda y escuelas. Según algunas fuentes [1], en el mes de abril de este año 2012, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos envió una carta al Ministerio de Relaciones Exteriores para conocer sobre la situación de 300 pobladores de Puerto Nuevo, en el Callao, que entre otros miles, presentan contaminación por plomo en la sangre, causados por la presencia de miles de toneladas en los almacenes de mineral ubicados en esta zona del Callao. Existe un “Estudio de determinación de responsabilidades y Remediación en los depósitos de concentrados de minerales en el Callao”, elaborado por Ground Water Internacional. Hace algunos años, los pobladores iniciaron una demanda contra el Estado exigiendo la inmediata suspensión del almacenamiento de plomo en varias plantas, así como la atención médica especializada para los afectados e indemnizaciones. La CIDH ya emitió 4 medidas cautelares a favor de ellos el 27 de diciembre del 2010, que aún no se han cumplido. La Corte dispone la suspensión de almacenamiento y transporte de plomo hasta que se elimine la contaminación ambiental, la reubicación de la población o se cambie de lugar a los almacenes, provisión de tratamiento médico especializado, mitigación del daño ambiental y coordinación con los 300 beneficiarios. “Los niños de plomo”. Los niños que estudian en un colegio de la zona, han sido los más afectados por la contaminación ambiental en el Callao, por estar cerca a los almacenes de plomo, cuyos montículos de plomo colindan con el colegio." |