Desde el 2007, Los Andes Copper, compañía canadiense con sede en Vancouver, es dueña del proyecto minero Vizcachitas a través de su subsidiaria en Chile “Vizcachitas Holding”, siendo desde el 2010, dueña del 100% del proyecto. Ubicado a 120 km al norte de Santiago de Chile en la cordillera del Valle de Putaendo, el proyecto planea explotar cobre, molibdeno y plata en una mina a cielo abierto por 45 años sobre el río Rocín, principal afluente del río Putaendo, que es tributario del Río Aconcagua. Putaendo es el último valle transversal de Chile libre de gran minería. Según la empresa, el proyecto se encuentra actualmente en etapa de Estudio de Prefactibilidad y en Estudio de Impacto Ambiental [1]. No obstante, como nos contó Violeta Rabi de la agrupación Putaendo Resiste,”esto en la práctica no es verdad. Recién están en la etapa de exploración minera, la cual durará por 4 años, con la realización de 350 sondajes”. Empresa y detalles del proyecto La empresa ha sido sancionada de manera sistemática en los últimos años por eludir el sistema de evaluación de impacto ambiental, incumplir con permisos municipales para operar e incurrir en daños ambientales, principalmente ligados al desvío de los cursos de cauces de agua y usurpación de aguas, sin tener derechos constituidos. En el año 2008, la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del proyecto minero presentada por Los Andes Copper fue denegada por el Servicio de Evaluación Ambiental [2]. Pese a esto, la compañía continuó con su programa de perforación, de manera ilegal, realizando más de 86 muestras, durante casi 10 años. Como lo manifiestan las comunidades e integrantes de Putaendo, “nunca hubo comunicación a la comunidad de que la empresa estaba realizando trabajos de exploración” [3]. A raíz de la necesidad de resistir “el extractivismo salvaje en su comuna” que busca imponer la firma canadiense, la comuna de Putaendo se organiza a partir del 2015 “en un gran movimiento sin precedentes (con el fin de) no permitir que se instale Andes Copper ni nadie en sus tierras” [4]. Entre el 2015 y 2016, la empresa fue objeto de cinco denuncias por parte de la comuna de Putaendo, Putaendo Resiste y la Junta de Vigilancia del Río por daños ambientales a la alta cordillera y por no contar con una Resolución de Calificación Ambiental [5]. El año 2016, la Dirección General de Aguas (DGA) la sancionó por intervenir en el cauce del río Rocín [6]. El año 2017, la Superintendencia de Medio Ambiente sanciona a la compañía canadiense por operar sin autorización ambiental y afectar la flora y fauna nativa y desviar el curso de las fuentes del agua [7], producto del cual fue obligada a presentar una Declaración de Impacto Ambiental (DIA) al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental con el fin de regularizar su situación. La DGA multó a la compañía en el 2019 por desviar el río Rocín de nuevo con $59 millones de pesos chilenos y por el consumo no autorizado de sus aguas [8]. Pese a este historial deplorable y sistemático de infracciones ambientales, la declaración de impacto ambiental (DIA) del proyecto fue aprobada en abril de 2019 [9], negando la oportunidad de una instancia de participación ciudadana que había sido formalmente solicitada. Aprueban proyecto de sondajes por unanimidad y reducen espacios de participación, comunidades se movilizan masivamente En mayo del 2019 Vizcachitas Holding ingresó un nuevo proyecto al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) para realizar 350 sondajes en 124 plataformas en el sector de Las Tejas durante los próximos cuatro años. En abril de 2020, en un primer intento, la Comisión de Evaluación Ambiental de la Región de Valparaíso aprobó sin participación ciudadana el proyecto [10]. Anticipando los impactos sociales y medioambientales de dichos pozos y pese al confinamiento por el Covid-19, la comunidad de Putaendo decidió salir a las calles para manifestar su rechazo al proyecto. Un gran contingente militar y de fuerzas especiales se hizo presente causando gran preocupación entre los manifestantes dejando en evidencia el poder de los intereses canadienses en el desarrollo extractivo en Chile. Gracias a las masivas movilizaciones y a las estrategias jurídicas utilizadas, la Corte Suprema obligó al proyecto a retrotraerse en septiembre del mismo año [11], y a las autoridades a respetar el derecho a la participación ciudadana solicitada por más de dos mil personas y denegada originalmente en el proceso. No obstante, el Servicio de Evaluación Ambiental en abril de 2021, aprobó el proyecto por unanimidad en la Comisión [12], “en un contexto de pandemia y del reclamo de algunos servicios públicos sobre la evaluación ambiental”, como puntualiza Rabi de Putaendo Resiste. Ante tales irregularidades, la comunidad ha ingresado diversos recursos de reclamación. Uno de ellos es una reclamación ante el director ejecutivo del SEA contra la aprobación que la Comisión de Evaluación Ambiental de Valparaíso dio al proyecto. En dicho escrito, treinta vecinas y vecinos junto con la Agrupación Putaendo Resiste son contundentes y realizan una serie de denuncias, entre ellas, que: “el proceso de participación ciudadana realizado fue de mala calidad, por no garantizar una participación real y su exclusión a actores sociales importantes del territorio y al realizarse en plena pandemia”; la aprobación del proyecto –ingresado como Declaración de Impacto Ambiental (DIA)– es arbitraria y presenta varias deficiencias en cuanto a … la fuente de agua para su operación; la DIA omite en su estudio de línea base una gran cantidad de especies vegetales y animales, las que sí fueron reconocidas en el informe encargado por el Municipio a la Consultora Simbiosis; la empresa minimiza arbitrariamente el Área de Influencia del proyecto…”[13]. ¿Cobre “sostenible” y “verde” para la transición energética? El Banco Mundial estima que durante los próximos 30 años será necesario extraer 3 mil millones de toneladas de minerales y metales para impulsar el proceso de transición energética mundial (una transición de energías fósiles a energías renovables). Esto sería “necesario” para evitar un aumento de temperatura por encima de los 2°C [14]. La transición energética es vital para la reducción de emisiones de gases efecto invernadero y, por lo tanto, en la lucha contra el cambio climático. Sin embargo, una transición energética que no cuestiona el estilo de vida imperial implicaría una ampliación de la frontera extractiva y la intensificación de metales como el cobre, que son esenciales para el proceso de descarbonización ya que se necesita en altas cantidades en la fabricación de paneles solares, turbinas de viento y, especialmente, carros eléctricos [15]. En este sentido, Los Andes Copper considera la transición energética no como una oportunidad para realmente reducir las emisiones de dióxido de carbono sino como una oportunidad financiera. De hecho, Vizcachitas es promocionada como “el próximo proyecto más importante de Chile” [16]. El mensaje principal es que “el cobre es un elemento crítico para sostener el cambio global hacia los vehículos eléctricos y la nueva economía verde”. Los Andes Copper va más allá y afirma que Vizcachitas producirá cobre “sostenible … para la transición verde” [17]. No obstante, el supuesto “cobre sostenible” que promueve Los Andes Copper se explotaría como lo afirma Alejando Valdés de Putaendo Resiste “a costa de transformar un valle, su comunidad y su ecosistema en una zona de sacrificio”. Asimismo, en su afán por venderse como una empresa verde, en mayo de 2021, Los Andes Copper anunció la creación del Comité Ambiental, Social y de Gobernanza (ASG) y el nombramiento de directora no ejecutiva con “una amplia experiencia en ASG” quien presidirá el ASG del Comité del Directorio. La pandemia del Covid-19 ha hecho que muchos inversionistas busquen invertir en proyectos “sostenibles”, proyectos alineados con los factores ASG. Al igual que otras empresas mineras en el mundo, Los Andes Copper se ha dado cuenta de la oportunidad financiera que esto representa y se ha volcado a incorporar tal mecanismo dentro de sus operaciones para presentar una cara amigable con el medio ambiente y la gobernanza y atraer mayor inversión a sus actividades[18]. Mientras que algunos ven los factores ASG como una herramienta potencialmente útil a favor de la justicia social y para combatir el cambio climático [19], otros, como la Comisión de la Bolsa y Valores de Estados Unidos, el regulador de Wall Street, les preocupa que los factores ASG estén engañando a los inversores: "en muchos casos estos se renombran cínicamente 'verde', sin presentar cambios perceptibles dentro de sus operaciones o en sus estrategias. Su propósito es simplemente marketing” [20]. Este pareciera ser el caso de Los Andes Copper y Vizcachitas. El cobre y litio de Chile pueden “ayudar a resolver el calentamiento global” Utilizando un lenguaje similar al de la empresa, el gobierno chileno enmarca también al cobre como una un metal necesario para la transición energética, relacionado con la electromovilidad y como una oportunidad financiera. Durante la convención minera más grande del mundo Prospectors & Developers Association of Canada (PDAC) (Asociación de Prospectores y Desarrolladores de Canadá, en español) que se realiza cada año en Toronto, Canadá, el ministro de minas y minería de Chile presentó a Chile con los siguientes mensajes: “somos y seremos un país minero”, “somos el primer productor de cobre a nivel mundial”, “la electromovilidad en Chile es nuestra cultura” y “En Chile, trabajamos por la minería sostenible”. El PDAC es una “conferencia anual donde las empresas mineras de todo el mundo convergen para hacer negocios y garantizar que puedan continuar operando de una manera en la cual puedan continuar priorizando las ganancias sin importar los costos” que sus operaciones generan para las comunidades: costos ambientales, sociales y/o de derechos humanos [34]. Igualmente, el senado ha venido realizando una serie de webinars sobre “la minería verde” en Chile donde el senador presidente de la Comisión desafíos del futuro ha manifestado que el cobre chileno puede ayudar a la humanidad y a resolver la crisis climática: “Chile, al tener Cobre y litio, puede intentar ayudar a resolver uno de los problemas más dramáticos que tiene la humanidad que son el calentamiento global”. Además agregó que “Yo transformaría el cobre, o el sentido del cobre no sólo como un buen negocio para Chile, o para algunos en Chile, lo transformaría en una gigantesca oportunidad para ayudar al tránsito que tiene que hacer el planeta para tener energía renovable, porque millones de dispositivos van a necesitar de cobre. Chile podría darle energía para toda la humanidad” [21]. ¿Qué amenaza el proyecto? Mientras que Los Andes Copper y el Estado chileno promocionan el cobre y a Vizcachitas como un proyecto que contribuirá a la fabricación de autos eléctricos, permitiendo la reducción de emisiones de carbono de dióxido, y que brindará ganancias económicas a futuro para sus inversionistas, este proyecto amenaza todo lo que dice proteger: ríos y los ecosistemas que dependen de ellos y paradójicamente, en vez de luchar contra el cambio climático lo que hará es empeorarlo aún más al poner en riesgo los glaciares cercanos al proyecto. Como lo expone la Fundación Glaciares Chilenos “Putaendo no tiene glaciares blancos, pero sí más de 120 glaciares de roca. El río Rocín es alimentado por estos últimos” [22]. Como lo plasman las comunidades locales en el video producido por ellas “¿Sabías que Putaendo está bajo amenaza?”, el proyecto amenaza los glaciares, humedales alto-andinos y flora y fauna endémica: “pumas, cóndores, gatos andinos y guanacos ..al menos 21 especies de plantas” [23] y alrededor de 100 glaciares de roca, los cuales corren el riesgo de verse impactados. Los glaciares rocosos en Chile son muy importantes para contener la expansión del desierto. Estas reservas son aún más estratégicas si se consideran las proyecciones del cambio climático para la zona, así como el hecho de que este territorio se encuentra en un período de sequía histórica desde hace más de 60 años. Las comunidades directamente afectadas, la comuna de Putaendo y la ciudad de San Felipe, están preocupadas dada la cantidad limitada de agua que se recibe en promedio al año. Cualquier perturbación en el área afecta de forma negativa su acceso al agua, “devastando la agricultura local, la ganadería, y el rico patrimonio natural y humano” [24]. Putaendo es una comunidad de agricultores y ganaderos. Se cosechan mandarinas, uvas, nueces, paltas. Gracias a su extenso patrimonio natural, cultural e histórico, Putaendo es un destino ecoturístico [25] con más de 1.300 petroglifos, senderos del Inca y pucarás y el carnaval más largo de Chile [26]. “Putaendo Sin Mineras” Debido a su riqueza humana, natural y agrícola, la comunidad de Putaendo y la agrupación Putaendo Resiste luchan desde hace ya una década por seguir siendo el único valle de la Zona Central sin Gran Minería [27]. Como alternativa al extractivismo que propone la empresa minera, las comunidades piden un parque andino en la cordillera. La organización multitudinaria ha logrado éxitos importantes y ellos notan la necesidad de celebrar lo que se ha ganado frente a la empresa minera desde el 2015. Algunos de los éxitos [29] que ellos subrayan son: -"las denuncias que hicimos el 2016, han impedido que la minera Andes Copper haya seguido operando y haciendo sondajes desde el año 2017 a la fecha y los obligamos a gastar millones de pesos en abogados y consultorías” - "Ha crecido el conocimiento y la conciencia ambiental de nuestra gente, también el cariño por nuestra tierra y patrimonio." - "Son muchos los jóvenes, adultos, trabajadores, profesionales, mujeres y artistas que se unen a esta resistencia y que aportan su amor por la Vida." Las comunidades también se han movilizado a través de cartas: En el 2019, Putaendo Resiste envió una carta a la sociedad canadiense denunciando a Los Andes Copper y pidiendo que ésta ayude a Putaendo Resiste en sus esfuerzos para que la minera canadiense se fuera de su territorio. “Carta Abierta al público canadiense: la empresa canadiense “los Andes Copper ltda.” Destruye, mata, extermina, miente y soborna en Putaendo, Chile” [30]. En el 2021, lanzaron un video “Artistas de Chile por un #PutaendoSinMineras” en el cual artistas reconocidos de Chile se solidarizan con Putaendo y su resistencia e informan al país y al continente entero sobre los impactos devastadores potenciales del proyecto para los ecosistemas y las poblaciones [31]. Como lo manifiesta Putaendo Resiste en una petición en Change.org que ha recolectado a la fecha más de 40.000 firmas en apoyo a su causa: “Sin agua todo lo demás pierde su valor. No queremos ser la próxima zona de sacrificio, Queremos un Putaendo Sin Mineras” [32]. (See less) |