El desarrollo de la ganadería extensiva, la expansión de la frontera agrícola y la extracción de madera ilegal son algunas de las causas de la destrucción de la Reserva de la Biosfera Bosawás (declarada por UNESCO en 1997). Indígenas Mayangna y Miskito quienes históricamente han habitado la zona han denunciado desde el 2005 invasiones a sus territorios. En el 2013, la situación entre indígenas y colonos tuvo un pico de violencia en donde un indígena Mayangna (Elias Charles Taylor) fue asesinado. Esta extracción de madera ilegal y violencia en la zona podría estar relacionada con redes de narcotráfico. Según un estudio de la GIZ/OXFAM, Bosawás pierde un promedio de 42,676 hectáreas por año. Y es que la institucionalidad del ramo (INAFOR y MARENA) no invierten los recursos necesarios para proteger la zona; sólo existen seis guardaparques para vigilar una extensión de 1,668 kilómetros cuadrados. El Batallón Ecológico (unidad militar para la protección de las Areas Protegicas) se ha hecho presente deteniendo camiones con madera ilegal pero no necesariamente protegiendo lo territorios indígenas. |