"Garabí-Panambí es un mega proyecto hidroeléctrico binacional proyectado para construirse sobre el río Uruguay, entre las jurisdicciones de las provincias argentinas Corrientes y Misiones, y el estado brasilero Rio Grande do Sul. El proyecto incluye dos diques localizados uno a la altura de la localidad correntina de Garabí y otro a la altura de la localidad misionera de Panambí. Entre las dos tendrían una potencia de 2200 MW que se sumaría el sistema energético de Argentina y Brasil. El proyecto viene de los años 70, cuando se firmó un acuerdo entre Agua y Energía Eléctrica (AyE) de Argentina y Centrais Elétricas Brasileiras S.A. (ELETROBRAS) de Brasil. Luego, durante muchos años el proyecto atravesó períodos de inactividad, revisión y proposición de alternativas. En el año 2008 los presidentes de Argentina y Brasil volvieron a ratificar el interés en la construcción de las represas, e instruyeron a Ebisa (continuadora de AyE) y Eletrobras reevaluar el potencial hidroeléctrico para reactivar el proyecto. En 2009 se firmó el proceso de licitación de los estudios de viabilidad técnica, económica y geológica. A partir de esta reactivación del proyecto, diferentes organizaciones ecologistas, asociaciones de productores rurales, iglesias, organizaciones política, sindicales, estudiantiles y movimientos sociales de los tres países afectados -Argentina, Brasil y Uruguay – desarrollaron diversas estrategias locales para oponerse a la construcción de las represas. Su principal reclamo es por los impactos ambientales y sociales (la defensa de los bienes comunes): la alteración del cauce natural del Uruguay con su consecuente afectación al ecosistema de la Cuenca del Plata, la enorme biodiversidad de la región, y el desplazamiento de quienes habitan las zonas inundables. Entre las acciones que se realizaron, hubo espacios de información y debate, interrupción de actividades a favor de las represas, manifestaciones, campañas, y entre lo más sobresaliente, una consulta popular en la provincia de Misiones, allí en el año 2011 se había sancionado una ley provincial de Soberanía Energética (Ley provincial IV- Nº56), la cual exige la realización de un Plebiscito que obliga al Estado misionero a convocar a una Consulta Popular vinculante obligatorio e irrenunciable, antes de encarar cualquier emprendimiento hidroeléctrico. En septiembre 2013, una marcha, conocida como Marcha por el Sí a la Vida, la libertad de los ríos y el NO a las represas, fue impulsada para exigir esta iniciativa, y arrancó desde Panambí para llegar a Posadas (Capital de la Provincia) después de recorrer 150 km, en medio de una tenue llovizna y niebla que envolvió a los caminantes quienes coreaban “Que llueva, que llueva, mejor mojarse que inundarse”. La movilización exigió además el cumplimiento de la Ley IV-Nº 56 que obliga al Estado misionero a convocar a un plebiscito vinculante, obligatorio e irrenunciable, antes de encarar cualquier emprendimiento hidroeléctrico. "Es conmovedor ver a tanta gente que llegó a Panambi para marchar, llegaron en auto, en colectivo, a caballo, todos estamos reclamando que cumplan la ley, que no se avance con el proyecto de Garabí sin antes consultarnos a los misioneros", lo dijo Zulma Quintana de Cáritas Oberá, quien además remarcó que los vecinos exigen información confiable en relación al proyecto y no “propaganda de parte de la empresa que ya está trabajando de manera ilegal en la zona”. “Es un día histórico, lindísimo” también sostuvo el médico ambientalista Juan Yahdjian tras haber caminado los 38 kilómetros el primer día a sus casi 78 años, destacó que esta es una gesta más de los misioneros para cuidar los bienes de nuestra madre tierra y “entregar a nuestros hijos y nietos una esperanza para vivir mejor”. A pie, a caballo, en bicicletas, en motos, en autos o en tractores, los manifestantes expresaron el rechazo a la construcción de la hidroeléctrica de Garabí y cualquier otra represa sobre territorio misionero. “La represa es riqueza para pocos y pobreza para muchos”, se repetía en los canticos en tanto que arengaban al gobernador Maurice Closs y al presidente de la legislatura Carlos Rovira a que se anime a consultar la voluntad del pueblo. “Ya le dijimos NO a Corpus en el 1996 y vamos a decirle NO a Garabí en el 2014”. “Es una marea en todo la Argentina que quiere poner en discusión un modelo de desarrollo y productivo en función del pueblo y no de las multinacionales” “Esta marcha ya no es de los que caminamos solamente, es de los que arman cadenas de oración pero no nos ven ni nos van a ver, es de los que preparan la comida en su casa y no van a caminar pero nos las envían, es de los amigos que en su trabajo se hacen un ratito para preguntar ¿Y...como va todo, que necesitan? es de los que hacen varios kilómetros para acercar pan, es de los niños que hacen dibujos en las escuelas y los mandan para exponerlos en la plaza, es de los que arman una caja y la mandan con un colectivo para la marcha, es de aquellos que nos ofrecen dos gallinas como su más preciado tesoro, es de aquellos que vienen de noche a traer música para alegrarnos un rato, es de aquellos que preparan obras de arte para mostrar en las plazas por donde pasamos, es de los que sueltan el volante y aplauden a nuestro paso, es todos aquellas almas sensibles que nos dicen que ganas de estar ahí”, compartió en su cuenta de Facebook Leandro Sánchez uno de los referentes de la Mesa. “La particularidad y algunas anécdotas, como la de Miguel un no vidente y su hermano que se sumaron a la Marcha, y caminaron hasta Santa Ana donde la recepción de los vecinos fue muy cálida, después que un grupo de vehículos hizo una recorrida por el centro de la localidad y se trasladaron luego hasta el puerto donde están los afectados de Yacyreta, donde repartimos unos volantes”, resumió Jorge "Koki" Duarte, secretario General de la CTA Misiones “ aunque estamos cansados pero felices y cada vez más convencidos de que estamos poniendo en discusión cuestiones de fondo, como el modelo de desarrollo y la matriz energética”. “El gobierno no se anima a consultar al pueblo porque tiene miedo de este NO, si esto es verdaderamente una democracia tiene que hacerlo”, destacó el Pérez Esquivel. La marcha trabaja en una carta que enviará al Papa Francisco. “Se confunde desarrollo con explotación. El desarrollo debe lograrse a través de un equilibrio entre las necesidades del ser humano y la naturaleza, se destruye a través del monocultivo, la mega minería, las represas, la cadena biológica, es un daño enorme”, apuntó Adolfo Pérez Esquivel Premio Nobel de la Paz, titular del Servicio de Paz y Justicia, a su llegada a Posadas para sumarse una vez más a la lucha de los misioneros para parar una mega represa. Son altamente contaminantes, destruyen el medio ambiente, es un desplazamiento de pobladores y va a generar daño no solo ahora sino también a las próximas generaciones”, “Misiones ya entregó con Yacyretá parte de su territorio, sin haber recibido ninguno de los beneficios que prometieron, creen que con la costanera están saldadas las afectaciones ambientales, el desplazamiento de miles y miles de pobladores, las enfermedades como el dengue, la leishmaniasis, y el deterioro del agua que consumimos” advirtieron desde la Marcha y agregaron que una mega represa más solamente agravaría la pobreza y exclusión de miles de misioneros que aún hoy no tienen acceso a la energía eléctrica, agua potable, a la vivienda, sin olvidar a los miles que serían expulsados de sus chacras para engrosar las villas de miseria que proliferan en las grandes ciudades de la provincia o serán obligados a emigrar a otros conglomerados como Buenos Aires. De esta marcha participaron vecinos de Puerto Maúa, Alecrín y otras localidades brasileñas que también serán afectadas si avanza la construcción de la represa de Garabí. Además de referentes nacionales de diferentes luchas que trajeron la solidaridad y el compromiso de instalar este NO misionero en todo el país. Los mbya (pueblos originarios) de nuestra provincia en su propio idioma también dijeron que no quieren más despojos ni más muerte sobre sus territorios. También estuvieron presentes los vecinos paraguayos con quienes compartimos las afectaciones por Yacyretá. “El Río no nos divide nos une, la lucha del pueblo es la misma, somos los mismos hijos de la tierra que estamos sufriendo la amenaza de las grandes empresas que actúan en América Latina y todo el mundo, para robar y para saquear las riquezas de nuestros países. Son los mismos enemigos y también es el mismo pueblo que va a enfrentar a esos enemigos”, remarcó un integrante del Movimiento de Afectados por las Represas de Brasil, el MAB y agregó que para ellos es fundamental el plebiscito de Misiones, “en Brasil no tenemos la posibilidad del plebiscito como tienen ustedes acá. Precisamos muchos de este plebiscito. Es de extrema importancia la participación del pueblo, la consulta del pueblo para fortalecer la democracia”. En la región brasileña, el MAB coordina desde 2013 proyectos de huertas e irrigación de pequeña escala en el municipio de Alecrim, Rio Grande do Sul (potencialmente afectado por las hidroeléctricas), dentro del programa Produção Agroecológica Integrada e Sustentável (PAIS). De esta manera demuestran de cómo se puede mejorar las condiciones de vida de los habitantes de la región con producción agroecológica y sin grandes emprendimientos energéticos [5]. Sin embargo, el gobierno provincial argentino no convocó al plebiscito solicitado, por lo cual la “Mesa Provincial No a las Represas” organizó una consulta popular en octubre de 2014. En la misma votaron más de 120.000 misioneros, 96% de los cuales se pronunciaron en contra de la construcción de las represas. El 8 de julio de 2015 con una gran manifestación es entregada en la Legislatura Provincial un “proyecto de Ley por los Ríos Libres”. Convocados por la Mesa Provincial contra las Represas, se movilizaron vecinos, artistas, agrupaciones ecologistas, gremiales, partidarias. El proyecto tomó estado parlamentario el 31 de julio de 2019. (See less) |