A 800m del núcleo urbano de la ciudad de Cáceres, capital de la provincia de Extremadura con alrededor de 96.000 habitantes y declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1986, la empresa Tecnología Extremeña del Litio SLU, filial de una joint venture promovida por las empresas Valoriza Minería (filial de Sacyr S.A) y Plymouth Minerals Ltd (que cambió de nombre para llamarse Infinity Lithium Corporation), quiere llevar cabo un proyecto de mina de litio a cielo abierto. Este proyecto de 412 ha (podría extenderse luego hacia 1,175 ha) prevé una zona de extracción (tajo) de 1,100 m de diámetro y 500 m de profundidad, una planta de beneficio con un horno para el proceso de tostado ácido, una balsa de evaporación para el lavado de los minerales y 290 ha para depositar los residuos [1][37][38]. La mina se pretende instalar en el paraje natural de la Montaña y la Sierra de la Mosca, situandose la corta en el Valle de Valdeflores, área de alta biodiversidad, de gran valor ecológico y de gran importancia social para la población cacereña. Esta sierra conecta espacios naturales protegidos de gran importancia (Zona de Especial Protección para las Aves ZEPA de la Ciudad Monumental y ZEPA Los llanos de Cáceres y Sierra de Fuentes), siendo un corredor ecológico fundamental en estos ecosistemas. Tradicionalmente tiene múltiples usos: es lugar de culto religioso (el Santuario de la Virgen de La Montaña está a 500m del tajo previsto); es zona residencial; sus caminos son usados para el senderismo y el deporte, es ideal para la actividad ambiental y educativa. Cuenta con una economía primarias tradicionales (cultivos de huertas, olivares, almendro, ganadería, apicultura, y producción de leña) [1]. Pero lo más importante es su masa forestal de bosque y dehesas mediterráneas que constituyen el pulmón verde de Cáceres que da a la ciudad un aire limpio que es sinónimo de salud. Esta mina pretende extraer litio, un mineral que se ha vuelto muy codiciado desde algunos años para la producción de baterías eléctricas para automóviles, celulares/laptop o el desarrollo de proyectos de energías renovables. Detrás del proyecto de mina en Valdeflores se mueven intereses geopolíticos para reducir la dependencia de la Unión Europea (UE) en su autoabastecimiento en litio: la UE es el tercer consumidor mundial después de China y EEUU de este mineral por ahora principalmente extraído de Australia y Sur América. Por esta razón fue creada en 2017 la "Alianza Europea para las Baterías" (EBA por su siglas en inglés) para llevar a cabo un "Plan de acción estratégico para las baterías" que tiene por objetivo la "creación de una cadena de valor estratégica para las baterías en Europa" [17] [18]. La creación de un cadena de valor a escala europea implica proyectos de extracción de litio como el de Valdeflores, o los que se pretenden desarrollar en Portugal [19], Suecia [20] o República Checa [21], por citar algunos, y la construcción de nuevas fábricas de baterías en distintos países destinadas principalmente a las plantas de ensamblaje de vehículos eléctricos existentes o previstos en Europa [21]. Esos intereses explican el gran respaldo que ha tenido el proyecto de mina en Valdeflores por parte de la Unión Europea. Existe una acuerdo firmado (Memorandum de Entendimiento) entre la empresa Infinty Lithium y EIT Inno Energy, la plataforma público-privada de inversión promovida por la Comisión Europea, para un financiamiento de 800 mil euros para la primera fase del proyecto y la asistencia técnica para obtener los 300 millones necesarios para el resto del proyecto [22]. Detrás de esos intereses geopolíticos, del engañoso discurso del sector minero para promover una "minería verde" o "climáticamente inteligente" o de las declaraciones de vicepresidente de la Comisión Europea Maros Sefcovic considerando la mina prevista en Valdeflores como un proyecto "admirable" se esconden los graves impactos socio-ambientales siempre ligados al desarrollos de proyectos mineros. Esos possible impactos han despertado un muy interesante proceso de organización ciudadana en la población cacereña para empezar a denunciarlos y poner un freno a este proyecto que amenaza su territorio, su salud y su riqueza bio cultural.
Respuesta ciudadana en defensa de la salud y en contra del proyecto minero San José de Valdeflores : Nacimiento de la Plataforma Salvemos la Montaña de Cáceres. La movilización social se inició en el verano del 2017 después de la primera noticia en prensa de la intención de volver a explotar las minas de Valdeflores. Se hicieron en este momento las primeras reuniones informativas, se creó la Plataforma ciudadana “Salvemos la Montaña de Cáceres”, se convocó una primera rueda de prensa, empezó la recogida de firmas y se realizó la 1ª ruta senderista a Valdeflores para informar del proyecto a las personas interesadas y dar a conocer los valores del lugar [1][2][3]. La plataforma empezó el trabajo en grupos (Coordinación, comunicación, dinamización, legal, vigilancia, apoyo ciudadano y general) con los objetivos principales de recopilar la mayor parte de información posible sobre el proyecto para su difusión entre la sociedad cacereña. Se realizó el primer material informativo “9 razones para decir No a la Mina a Cielo Abierto en la Montaña de Cáceres” [1][4]. A lo largo de los tres años se realizarán numerosos documentos informativos sobre los riesgos de este proyecto como vidéos [23] [24], [25] [26], mapas [28] [29] o carteles [30]. Todos estos materiales sirvieron de base para las innumerables charlas, talleres, reuniones vecinales y encuentros que se realizaron y se sigue realizando para informar y concientizar a la poblacióٕn sobre los impactos que tendría este proyecto. Los principales impactos denunciados son [30][38]: - la gran cercanía del proyecto con zonas habitada: el tajo abierto previsto está a 300 m de una planta depuradora de agua, a 600m del Santuario Virgen de la Montaña, a 800m del casco urbano, a 1 km del Residencial Universidad, 1.5 km del nuevo hospital de Cáceres y 1.6 km del Campus Universitario (ver mapa mapa en banner). Cáceres se convertiría en la primera ciudad de mundo en número de habitantes que viviría tan cerca de una mina a cielo abierto. La segunda es Cerro de Pasco, con 70.000 habitantes, declarada en “emergencia ambiental“ y recientemente en “emergencia sanitaria“ por el Ministerio de Salud peruano. Allí la mina ya se ha comido parte de la ciudad y de la salud de sus habitantes. - los impactos a la salud: la cercanía de la mina representa un alto riesgo por la salud de los habitantes en razón del polvo tóxico y partículas en suspensión generados por los trabajos de excavación de la mina que se depositarán en las zonas urbanas por el efecto de los vientos. A este polvo se sumarían los gases tóxicos generados por el horno de tostación con sulfatos y los impactos psicológicos generados por las explosiones, ruidos, trafico de vehículos pesados etc. - los impactos al medio ambiente : gran parte de la montaña será destruida por la implementación de la mina lo que representa un pérdida ambiental y paisajística sin remedio. Posible agotamiento de las aguas subterráneas y contaminación del acuífero importante de El Calerizo por las aguas ácidas del proceso de lavado del mineral. Todos esos materiales informativas y de denuncia se basan en un meticuloso trabajo de investigación realizado por la Plataforma Salvemos la Montaña de Cáceres a partir de documentos oficiales y de contactos con personas expertas en los impactos generados por la actividad minera. Durante esta investigación se descubrió el entramado empresarial existente entre Valoriza Minería, filial de Sacyr, que junto con Plymouth Minerals, de Australia, por el medio de una Joint Venture crearon la empresa “Tecnología Extremeña del Litio”, con sede social en Madrid, a la que traspasaban los derechos en una típica intención de eludir responsabilidades [1][5]. Este proceso de investigación ha servido para descubrir la cantidad de irregularidades administrativas existentes relacionadas con este proyecto. Por ejemplo el Permiso de Investigación (P.I.) “Valdeflórez” de alrededor de 60 hectáreas, fue solicitado por Valoriza Minería que después lo transmitió a Tecnología Extremeña del Litio, empresa de reciente creación, con el capital social mínimo, y por tanto sin solvencia técnica ni financiera, requisito exigido en la legislación estatal y regional, ante lo cual se limitaba a alegar contar con el “respaldo de Valoriza Minería, que poseía el 100% de esa empresa (TEL)” [1]. El descubrimiento de esas irregularidades permitió iniciar recursos legales como el interpuesto por las organizaciones Asociación para la Información y Comunicación Ambiental (ACIMA) y la Asociación para la Defensa de la Naturaleza y los Recursos de Extremadura (ADENEX) el 27 de noviembre del 2017 al otorgamiento del P.I. “Ampliación a Valdeflórez” por incumplir con los plazos de exposición pública estipulados en la legislación: debía publicarse y permitirse alegar durante al menos 30 días, y no 15 como ocurrió [6]. Con este recurso se anuló el otorgamiento del P.I. “Ampliación a Valdeflórez” y se realizó una nueva exposición pública para permitir la participación ciudadana [7]. En enero de 2018 se presentaron alrededor de 10.800 alegaciones al nuevo Otorgamiento del P.I. “Ampliación a Valdeflórez”[1]. Esta estrategia de recurso legal y presentación de alegaciones ciudadanas se repitió en 2018 por el otorgamiento del nuevo Permiso de Investigación “Trasquilón“ contra el cual se colectaron más de 8.000 alegaciones con el principal motivo que el proyecto de investigación y el plan de restauración presentados por la empresa muestran claras señales de ser un “copiar y pegar” de otros proyectos [1]. En Mayo de 2018 ACIMA presenta Recurso de Nulidad sobre el otorgamiento del P.I. “Valdeflórez”, publicado en 2016, por el mismo motivo que se retrotrajo el P.I. “Ampliación a Valdeflórez”: no haberse informado a las personas interesadas, no haberse publicado según establece la Ley. Un año después, en mayo del 2019 la Consejería de Economía e Infraestructuras anuló la resolución por la que otorgaba el P.I. “Valdeflórez” en octubre de 2016, aceptando el dictamen emitido por la Comisión Jurídica de Extremadura que revisaba de oficio el trámite [31] [32]. Las actuaciones tuvieron que retrotraerse y publicarse de nuevo en boletines oficiales para abrir un periodo de 30 días durante los cuales se presentaron más de 30.000 alegaciones. Otra acción legal fue la denuncia impulsada por la asociación de vecinos Sierra de la Mosca el 12 de enero de 2018 ante el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) por tala de árboles y apertura de caminos ilegales realizados por la empresa Tecnología Extremeña del Litio (TEL) en el Valle de Valdeflores. El 16 de febrero del 2018 el Ayuntamiento dicta una Providencia de Incoación que exige restaurar el orden vulnerado y como medida cautelar suspender, paralizar y precintar las obras de la mina [12]. Las máquinas son retiradas del valle de Valdeflores por la propia empresa y se terminan los sondeos y los movimientos de tierras. En mayo del 2019 la Dirección General de Medio Ambiente de la Junta de Extremadura sancionó a Tecnología Extremeña del Litio por apertura de viales y arrasar vegetación sin la preceptiva Evaluación de Impacto Ambiental Abreviada y le obliga a restaurar la zona dañada, además de una sanción de 2.500 € [16]. Otro gran logro fue el rechazo del proyecto por parte del ayuntamiento de Cáceres que en un pleno municipal en abril del 2018 votó en contra de la modificación del Plan General Municipal (PGM) solicitado por la empresa por el hecho que el PGM en vigor no permite las actividades extractivas y mantiene una serie de protecciones sobre la zona de la Montaña. Además de los recursos legales se organizaron distintas actividades culturales y movilizaciones de las cuáles se puede destacar la marcha senderista realizada el domingo 21 de enero de 2018 por la zona amenazada por el proyecto en la cual participan alrededor de mil personas, subiendo a la Montaña por diferentes caminos [8]. El 3 de febrero y 14 de abril se realizaron dos manifestaciones en la Plaza Mayor de Cáceres para mostrar la repulsa al proyecto, a las cuales asistieron entre 2.5 y 3 mil personas [9][10][11][27]. A lo largo de esos años la Plataforma Salvemos la Montaña de Cáceres fue también tejiendo articulaciones con otras luchas, participando por ejemplo en febrero del 2019 al IV encuentro organizado colectivo ContraMinAcción de Galicia con varios proceso organizados contra proyectos mineros en la península ibérica [15]. Se han impulsados también denuncias sobre la la participación del Banco Europeo de Inversiones y la Comisión Europea y las declaraciones del vicepresidente de la Comisión Europea Maros Sefcovic [34]. Estaba prevista una comparecencia de la Plataforma Salvemos la Montaña de Cáceres en el Parlamento Europeo pero fue postergada en razón de la crisis sanitaria por el Covid19. Por su importante labor a largo de esos años la Plataforma Salvemos la Montaña de Cáceres recibió el Premio “Berta Cáceres” de Ecozine en mayo del 2018 [12] y el premio de la Asociación para la Defensa y los Recursos de Extremadura (Adenex) en noviembre de 2019. (See less) |